De acuerdo a los primeros relevamientos, la inflación se ubicó por debajo del 7%. Señalan que los alimentos «quedaron por debajo del índice general y continúan con la tendencia a la baja».
Luego de desacelerarse al 7,8% en mayo, la inflación habría continuado con una tendencia similar en junio. Así se desprende de los primeros relevamientos privados que se difundieron en relación al sexto mes del año, que proyectan una variación del IPC por debajo del 7%. De cumplirse estos pronósticos, se trataría del dato más bajo desde febrero.
De acuerdo al análisis de las consultoras, dos factores inciden fundamentalmente en esta nueva baja mensual de la inflación: por un lado, destacan que se trata de una cuestión estacional; por otro, se debe a una menor variación del rubro “alimentos”, que habría vuelto a evolucionar por debajo del índice general y continúa con una tendencia “a la baja”.
Al respecto, de acuerdo al relevamiento de Alimentos y Bebidas que realiza la consultora LCG, en la cuarta semana de junio se observó un incremento del 0,1% mensual, “desacelerando fuerte contra 2,6% de la semana previa”. “La inflación promedio mensual también se desaceleró a 5,6%, y acumula una baja de 3,3 p.p. respecto al pico registrado a principios de mayo. Medida punta contra punta, la inflación en alimentos y bebidas fue del 4,1% en junio”, destacaron desde la firma.
Los aceites lideraron las subas del mes, según LCG, con un incremento del 8,8%, y le siguieron los productos lácteos y huevos, con el 8,5%. Las carnes, en tanto, treparon 3,3%, mientras que las verduras lo hicieron 1% y las frutas, apenas 0,1%.
Durante la última semana de junio, el porcentaje de productos que aumentó “volvió a los niveles de las semanas anteriores: 20%”. “Sumando este último dato, el promedio mensual es de 28% actualmente, lo que significa que el total de la canasta ajustó cada 3,6 semanas en promedio”, destacaron desde LCG.
Una evolución más moderada de los alimentos, la división con mayor incidencia dentro del IPC, ayudó a que la inflación de junio volviera a desacelerarse frente al mes previo. Así lo destacaron los sondeos de distintas consultoras privadas.
Por caso, el IPC de la Fundación Libertad y Progreso mostró un aumento de 6,8% mensual en junio (en mayo, este indicador presentó una variación de 9,1%). “Este resultado marcaría, por segundo mes consecutivo, una desaceleración en la tasa de variación del índice de precios al consumidor”, destacaron desde la firma.
“Luego de que el INDEC registre cinco meses consecutivos de aceleración, los últimos dos meses muestran una moderación en la suba mensual del IPC. A pesar de lo anterior, esto no necesariamente significa una desaceleración en la inflación. En el segundo trimestre del año la estacionalidad de precios juega a favor, por lo que el IPC suele registrar variaciones mensuales menores a la de marzo. Que el índice de precios de junio sea menor al de mayo está dentro de lo esperable manteniendo la misma velocidad crucero de la inflación subyacente”, detallaron.
Y remarcaron: “Vale la pena notar que el rubro ‘Alimentos y bebidas no alcohólicas’ quedó por debajo del índice general, aumentando 6,2% y sigue una tendencia a la baja. No obstante, se destacan fuertes aceleraciones en los servicios: ‘Medicina’ (10,1%) y ‘Transporte’ (7,2%). Ambos con incidencias de 0,9 puntos porcentuales”.
En la misma línea, desde la firma C&T detallaron que su relevamiento de precios minoristas para el Gran Buenos Aires presentó una variación de 6,7% mensual, por debajo del 8,7% que había medido en mayo. “La moderación fue generalizada en los rubros, aunque fueron particularmente relevantes las de vivienda, y alimentos y bebidas”, explicaron desde la firma.
“Vivienda, que había aumentado 11,8% en mayo lo hizo en 7,7% en junio. Dos factores se combinaron: en mayo hubo incrementos de electricidad y gas, mientras que en junio sólo hubo de electricidad, y no hubo ajuste en los salarios de los encargados de edificio”, detallaron.
Por su parte, al analizar lo que sucedió con “alimentos y bebidas, el rubro de mayor peso”, sostuvieron: “Hubo una desaceleración significativa en la primera quincena del mes de la mano de la baja de las verduras y el menor incremento de las carnes. Así, el rubro creció 5,2% en el mes frente al 8,4% de mayo. Vale notar que en la tercera semana del mes los alimentos y bebidas treparon fuertemente para luego moderase en la última semana del mes”.
(Fuente: Ámbito.com)