La UTEP realizó sus primeras elecciones, cambió a su Secretario General y se prepara para ingresar a la central obrera. Además, dialoga con los dirigentes piqueteros para realizar medidas de fuerza en conjunto.
El sindicato que representa a los trabajadores excluidos del mercado laboral, la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), se alista para ingresar a la CGT y, desde allí, unir fuerzas para resistir las políticas de ajuste que anunció en campaña el presidente electo Javier Milei, entre ellas una posible reducción en programas como el Potenciar Trabajo y la obra pública.
Con la firme intención de formar parte de la mayor central obrera del país, y con el aval que le da sus 420.000 afiliados, la UTEP realizó, por primera vez, una elección para renovar sus autoridades.
El secretario general de la organización ya no será Esteban “Gringo” Castro, sino Walter Alejandro “Peluca” Gramajo. Ambos son dirigentes del Movimiento Evita. Castro, un militante católico, devoto a la Virgen de Luján, y que tiene como lema “fe y lucha”, además es el principal referente del Movimiento Misioneros de Francisco.
Fue el propio Castro quien, ante de dejar la conducción de la UTEP, tendió puentes con los dirigentes de la Unidad Piquetera, entre ellos con Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, para sentarse a consensuar posibles medidas de fuerza en conjunto contra el gobierno de Javier Milei y hasta resistir en la calle el ambicioso paquete de reformas y leyes que enviará a sesiones extraordinarias parlamentarias y que contemplaría una profunda reforma del Estado, cambios sustanciales en la economía argentina, nuevas reglas de juego en el sector energético, una reforma laboral y la modificación del esquema de política social, entre otras propuestas que por ahora son sólo trascendidos.
Si bien aún no hay avances al respecto, algunos dirigentes evalúan movilizarse el 10 de diciembre a las inmediaciones de la Plaza de Mayo para repudiar la jura del binomio Javier Milei-Victoria Villarroel. La opción no es compartida por la mayoría de la nueva conducción de la UTEP ya que la Libertad Avanza se impuso de manera clara y contundente en el balotaje por más del 11% de los sufragios.
Si bien la UTEP es apartidaria, la mayor parte de los movimientos sociales que la integran forman parte del gobierno saliente del Frente de Todos. Sus principales dirigentes no solo formaron parte del gobierno de Alberto Fernández, en diversos cargos, por ejemplo, en carteras como Desarrollo Social, Trabajo, Obra Públicas y Jefatura de Gabinete; también militaron la candidatura del ministro de Economía, Sergio Massa.
Entre esas organizaciones sociales destacan el Movimiento Evita, Somos Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y el Frente Popular Darío Santillán, entre otros.
“La importancia de la votación es para ratificar la participación de cientos de miles de hermanos y hermanas organizadas en la economía popular y, sobre todo, organizados sindicalmente en la UTEP”, refiere ante Infobae Gildo Onorato, dirigente del Evita y opina: “Nos parece relevante democratizar los sindicatos en este caso fue una votación directa con una concurrencia mayor al sesenta por ciento y creo que es un instrumento que va a servir mucho para seguir dignificando el trabajo de nuestro sector”.
Onorato, quien hasta el viernes era el secretario gremial de la UTEP resalta: “De esta manera afianzamos nuestro carácter institucional con la voluntad de ser un gremio confederado en el marco de la CGT. Con la cual vamos a fortalecer y afianzar todos nuestros vínculos en post de garantizar la mayor unidad posible de la clase trabajadora para defender nuestros derechos e impedir que se intente avasallar nuestra realidad. Vienen años con muchas dificultades y tenemos que estar unidos, organizados y sindicalizados para que no falten derechos, alimentos y trabajo a las familias más humildes de nuestro país”.
En marzo de 2021, el Ministerio de Trabajo, por entonces a cargo de Carlos Moroni, ya había reconocido a la UTEP como representante de la economía popular y le otorgó la matrícula con el reconocimiento social para mediar en conflictos laborales.
En agosto de ese año, se le adjudicó la personería social y ahora esperan la personería gremial. Héctor Daer, cotitular de la de la Confederación General del Trabajo ya le había anticipado a Infobae que la UTEP sería bien recibida en el seno de la central obrera.
El secretario general de la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad (FATSA) advirtió que la central obrera no dará “ni un paso atrás” en la defensa de los derechos de los trabajadores ante el gobierno de Milei, que jurará como Presidente el 10 de diciembre y, como la UTEP, expresó su rechazo a la paralización de la obra pública y a la posibilidad de que no cumpla con el pago del medio aguinaldo al sector estatal.
La elección en la UTEP, que tuvo a la lista 10 Celeste y Blanca como única postulante, fue una muestra de “unidad congregando a todas las organizaciones sociales” que forman parte de esa organización, destaca el comunicado de la organización. La lista llevaba por nombre “Unidad Tierra Techo y Trabajo”, una síntesis, entienden, de los tiempos por venir.
Junto a “Peluca” Gramajo, la conducción del gremio de la economía popular estará compuesta, entre otros, por Dina Sánchez, la militante feminista y referente del Frente Popular Darío Santillán; Norma Morales, de Somos Barrios de Pie; Ramiro Ezequiel Berdesegar, dirigente de la Corriente Clasista y Combativa y Johanna Vanesa Duarte, también dirigente del Evita.
Dos de esos dirigentes le expresaron a este medio su preocupación y estado de alerta ante los posibles ajustes que realizaría Milei desde el flamante Ministerio de Capital Humano que estará bajo el mando de la licenciada en Ciencias de la Familia, Sandra Pettovello. Bajo esa estructura serán subsumidas las carteras de Desarrollo Social, Salud, Trabajo y Educación, que tendrán el rango de secretarías.
Desarrollo Social será conducida por Pablo de la Torre, hermano del ex intendente de San Miguel, Joaquín de la Torre. Será él quien deberá mediar con los reclamos piqueteros y los movimientos sociales.
Desde la UTEP especulan con que los recortes en la asistencia social podrían llegar a través de las bajas en los programas Potenciar Trabajo; las redes de contención que las organizaciones populares tienen en los barrios; los alimentos que llegan desde Desarrollo Social para comedores y merenderos; transferencias para la compra de insumos; la asistencia a través de la Tarjeta Alimentar; los convenios firmados con cooperativas a través del Potenciar Trabajo para actividades sociocomunitarias y la urbanización de los barrios populares. El 60% de esa actividad se desarrolla a través de cooperativas locales que dependen de las organizaciones sociales.
En este punto hay que recordar que Sergio Massa ya había dispuesto que a partir del 1°enero el programa Potenciar Trabajo quede bajo la órbita de Trabajo. Es decir, le quitó uno de los programas más importantes que manejaba la cartera de Victoria Tolosa Paz a través de la Secretaría de la Economía Popular, a cargo de Emilio Pérsico, uno de los líderes del Movimiento Evita.
La tensión entre Milei y los dirigentes sociales va in crescendo. El presidente electo se enfrentó de manera verbal al líder del Polo Obrero Eduardo Belliboni después que este dijera: “Yo quiero que al gobierno de Milei le vaya muy mal”.
El presidente electo le respondió sosteniendo que el dirigente de izquierda “está nervioso porque queremos limpiar lo que tiene que ver con los intermediarios” y abundó: “La ayuda la tendrían que recibir de manera directa las personas vulnerables y que nada quede en el medio. Lo único que vamos a hacer es transparentarlos (los planes) y quitar del medio los intermediarios. No solo es una perversión que les quiten dinero, sino que también es una perversión que después los obliguen a participar de marchas y demás para mantener el negocio de cuatro o cinco vivos”, advirtió Milei en declaraciones a radio La Red.
Si bien los dichos de Milei estaban direccionadas a la figura de Belliboni y al Polo Obrero, también podrían alcanzar a dirigentes de otros movimientos sociales que operan de la misma manera, pero con un agravante, hasta ahora, cargos de relevancia dentro de la estructura de Desarrollo Social y de la cual dependen programas como e Potenciar Trabajo, o el Registro Nacional de Barrios Populares son ocupados por dirigentes de peso de las organizaciones sociales que forman parte de la UTEP.
Ellos se defiende afirmando que Milei desconoce el manejo de los planes ya que no son “intermediarios” de nada. “Cada beneficiario accede al importe que cobra de manera mensual a través de una tarjeta personal”.
La discusión esta abierta y la posibilidad que las diferencias se diriman en la calles es un hecho. El presidente electo está advertido de esta situación. Por eso, le infiere a sus colaboradores, la elección de quien esté a cargo del ministerio de Seguridad será clave.
“Nosotros estamos dispuestos a meter a los piqueteros -que corten rutas y arrojen piedras- presos”, recordó Milei y profundizó: “No hay que tener miedo a las palabras porque al delincuente se lo reprime, se lo castiga, se lo encierra”, planteó Milei al proponer una serie de reformas en seguridad. “El que las hace, las paga”, dictaminó y aseveró: “Nuestra visión no es negociable”.
(Fuente: Infobae)