La ministra de Gobierno y Justicia de la Provincia, Rosario Romero, lanzó su precandidatura a Intendenta de Paraná. Lo hizo a través de Twitter y sostuvo: “Estoy convencida de que es necesario continuar con el trabajo que Beto viene realizando”
“Quiero compartir que seré precandidata a la intendencia de Paraná. Estoy convencida de que es necesario continuar con el trabajo que Beto viene realizando; tengo confianza en lo logrado y en que el horizonte marcado para nuestra ciudad es el correcto”, publicó Romero en su cuenta de Twitter.
“El equipo de gestión municipal ha logrado una transformación evidente en Paraná, con una inversión en obra pública notable, orden y modernización de la administración, y un trabajo conjunto con todos los sectores para la ampliación y diversificación productiva de la ciudad”, manifestó al destacar la gestión de Bahl y aseveró que “estas políticas deben ser sostenidas y profundizadas en el tiempo, nosotros podemos hacerlo y sabemos cómo”.
“Paraná ha experimentado múltiples cambios y reinicios constantes. Sabemos que aún queda mucho por mejorar, pero no lograremos hacerlo si comenzamos desde cero nuevamente”, enfatizó.
Desde que el actual Intendente de Paraná, Adán Bahl, anunció su precandidatura a gobernador y, consecuentemente, descartó ir por otro mandato para conducir la Municipalidad, el nombre de Rosario Romero comenzó a sonar fuerte para sucederlo.
Entre el lanzamiento de Bahl (el 2 de mayo) y el de Romero pasaron 16 días y se produjeron altas y bajas en el ring de quienes darán pelea dentro de la estructura del Partido Justicialista para llegar a la Intendencia.
La viceintendenta de Bahl, Andrea Zoff, cuyo nombre figuraba entre los posibles precandidatos, decidió correrse. En contraposición, este miércoles el Delegado Territorial del Enohsa, Nicolás Mathieu, informó que se suma a la carrera electoral por suceder a Bahl.
También vienen manifestando sus intenciones de acceder al Ejecutivo municipal de Paraná el ex diputado provincial Gustavo Guzmán, el concejal David Cáceres y la dirigente del Movimiento Evita, Sandra Cislaghi.
De todos los nombres que están dando vueltas, el de Rosario Romero es el que recibiría la bendición del gobernador Gustavo Bordet.
Trayectoria de Romero
Desde su juventud, Rosario Romero militó en el Partido Intransigente (PI), que condujera el desaparecido Oscar Allende. Fue uno de los partidos que confluyeron en el Frente Grande forjado en torno al Grupo de los 8 -en referencia a los diputados peronistas que rompieron el bloque de legisladores nacionales en disconformidad con las políticas neoliberales que aplicó Carlos Menem.
La Ministra tuvo un primer impacto político cuando se impuso a Roque Mario Tito en la interna del Frente Grande de 1999. Esa elección debía definir el candidato a vicegobernador que integraría la fórmula bicolor de la Alianza. El postulante a la gobernación era el radical Sergio Montiel, quien rechazó la nominación de Romero por sus vínculos con el ex mandatario justicialista Jorge Busti.
En 2003, integró la lista de diputados nacionales del Frente Justicialista. En 2007, con la elección de su esposo José Carlos Halle como intendente de Paraná, pasó a desempeñarse como Secretaria General de la Gobernación. A la par, resultó electa como convencional constituyente para la Reforma de 2008.
El realineamiento de Busti con el peronismo no K llevó a Halle y a Romero hacia ese sector. El intendente no alcanzó su reelección en 2011. Y la funcionaria pasó a integrar la Cámara de Diputados de la Provincia por el Frente Entrerriano Federal.
En 2015 renovó su mandato, pero esta vez dentro del PJ oficial, que además le reservó un lugar en la conducción partidaria que se renovará en junio. Tras la derrota en las elecciones legislativas nacionales del 2017, el gobernador Gustavo Bordet reordenó su gabinete y Romero pasó a desempeñarse como ministra de Gobierno y Justicia, cargo que detenta hasta la actualidad.
(Fuente: APF Digital)