Mientras comienzan las extraordinarias, el Congreso termina de discutir cómo serán las representaciones. También hay dudas sobre su funcionamiento en el periodo que arranca hoy.
La actividad que tendrá el Congreso en los próximos meses será crucial. Su rol preponderante arranca hoy con el periodo de sesiones extraordinarias, pero desde el 5 de enero tendrá el texto del DNU 70/2023 firmado por el presidente Javier Milei para ser analizado, en lo que se espera sea una fuerte pulseada.
Para ello, las autoridades de ambas cámaras trabajan por ahora en la conformación de la Comisión Bicameral permanente de Trámite Legislativo, donde se tratará el DNU presidencial. Tienen que designar un total de 16 diputados y senadores, representantes de los principales espacios políticos que las conforman.
Si bien el Gobierno no incluyó el tratamiento de ese decreto de necesidad y urgencia dentro del temario de las sesiones de verano, si se constituye la comisión, la norma que desregula la economía puede tratarse. La duda es si se podrá incorporar en el tratamiento en el recinto.
Uno de los artículos de la Ley 26.122 sostiene que la Comisión Bicameral Permanente «cumple funciones aún durante el receso del Congreso de la Nación», con lo cual puede deliberar en cualquier momento. Sin embargo, las interpretaciones son variables respecto a si se puede tratar o no en el recinto de sesiones fuera del período ordinario, que va desde el 1° de marzo al 30 de noviembre de cada año, con posibilidad de prórroga.
«Si logramos sostener este DNU, va a ser muy positivo», dijo el presidente durante una entrevista del fin de semana en el programa de Mirtha Legrand.
«Apuntamos a que haya un shock de inversiones gracias al shock de libertad que damos en ese DNU. La clave de este plan es que el aumento de ahorro por el ajuste tenga contrapartida en inversión», sostuvo el mandatario.
«La idea es que haya un shock de inversiones como consecuencia de un shock de libertad con quita de regulaciones», insistió.
Tal como publicó Perfil días atrás, la activación de la Comisión que tratará el DNU es uno de los factores que intervienen en el mecanismo de control entre poderes. Hasta la actualidad no hay pleno acuerdo acerca de quienes integrarán la comisión.
La discusión por la conformación
Este medio consignó que la oposición de Unión por la Patria se centra en el acuerdo original que se suscribió a nivel parlamentario para distribuir la composición de las comisiones por el sistema D’Hont, lo que lo beneficiaría en el reparto por tener la primera minoría tanto en el Senado como en Diputados.
No obstante, en la vereda de en frente responden que la comisión tiene su propio reglamento y que la distribución es por la proporción de las representaciones políticas. Con este sistema, a UxP le corresponderían cuatro lugares que, según confirmaron desde el bloque que comanda Germán Martínez, todavía no fueron designados. Los otros cuatro nombres sí fueron definidos y son Oscar Zago (LLA), Hernán Lombardi (Frente PRO), Francisco Monti (UCR) y Nicolás Massot, como referente de un acuerdo entre Cambio Federal de Miguel Pichetto, Innovación Federal y la Coalición Cívica.
En el Senado la situación es distinta y aparecieron viejas discusiones en torno a cuál es la representación de Unión por la Patria, como ocurrió en la disputa por los lugares en el Consejo de la Magistratura, a través de la división en dos bloques Nacional y Popular y Unidad Ciudadana. De acuerdo a su postura, serían dos los senadores postulados por cada uno, María Teresa González y Mariano Recalde por el primer espacio y Anabel Fernández Sagasti por UC.
En el oficialismo, en tanto, creen que solo le corresponden tres lugares, mientras hay cinco espacios reservados para Juan Carlos Pagotto (LLA), Víctor Zimmerman (UCR), Luis Juez (Frente PRO), Carlos Espínola (Unidad Federal) y Juan Carlos Romero (Cambio Federal).
(Fuente: Perfil)