A la polémica por la visita de diputados a genocidas se le suma una denuncia a la cordobesa María Celeste Ponce por exigirle un pago a asesores a cambio de contratos.
La tensión que se vive en el seno libertario del Congreso, por la polémica visita de un grupo de diputados del oficialismo a represores en Ezeiza, tiene un condimento más para sumar a la fricción puertas adentro de la bancada. Se trata de la denuncia que se conoció en las últimas horas por el supuesto pago que la diputada cordobesa de La Libertad Avanza, María Celeste Ponce, les habría exigido a sus colaboradores a cambio de contratos.
El primero en dar a conocer a esto fue el youtuber El Presto, quien en uno de sus streaming habló de la supuesta maniobra que habría realizado la parlamentaria. Después de diciembre, y al nombrar de manera muy rápida a un nutrido grupo de asesores, la diputada le habría exigido a una de las denunciantes el pago de 500 mil pesos por un contrato a través del cual la asesora cobraba alrededor de 700 mil pesos.
Ponce llegó de manera directa a la lista de diputados el año pasado por un contundente pedido desde la cúpula libertaria y tras conformar Pumas Libertarios, una agrupación con una fuerte base en el sur de la provincia de Córdoba. «Vino impuesta e injertada de afuera y hubo que acceder. Y siempre se ponía al frente la relación con el muchacho», dijo a LPO un conocedor de la manera en la que se armó la campaña 2023 y cómo jugaron los sellos alrededor de la candidatura de Javier Milei.
Así, Ponce se convirtió en una de las tres diputadas de La Libertad Avanza, junto a Gabriel Bornoroni y Cecilia Ibáñez. Un tridente que no tiene buena sintonía, a pesar de ser los tres representantes del bloque y oriundos de una misma provincia.
La diputada Ponce le habría exigido a una de las denunciantes el pago de 500 mil pesos por un contrato a través del cual la asesora cobraba alrededor de 700 mil pesos
«Si esto crece, va a ser otro tema de fricción que se suma a lo de la visita a los genocidas», dijo una persona que conoce el día a día de la bancada que conduce Bornoroni y reconoció el anticipo de LPO en torno a la posibilidad de armar un interbloque con el PRO. «Es probable, es lo que siempre quiso Milei, que nos juntemos con los amarillos. Estamos en conversaciones», dijo.
Ibáñez ya se fue en abril al bloque del Movimiento de Integración y Desarrollo (MID), que conduce Zago. «Ponce es La Libertad Avanza igual que Bornoroni y Cecilia es MID», diferenció una persona del bloque para describir la tensión cordobesa.
No obstante, otros creen que no habrá interbloque, que Zago terminará negociando y que estas movidas se producen para raspar a Martín Menem, en la conducción de Diputados, y al propio Bornoroni.
En el entorno de Ibáñez aseguraron no estar al tanto de la situación de Ponce y la denuncia por extorsionar a sus asesoras, sólo lo que trascendió. Pero aclararon: «si llega a ser así, Cecilia se va a despegar de manera completa de Ponce. Es todo lo contrario a lo que Ibáñez piensa, hace y dice», dijeron.
La situación vuelve a encender las alertas en Córdoba porque Bornoroni, además de ser el jefe de bloque en Diputados, fue bendecido por Karina y Menem para armar en la provincia y quedarse con el sello La Libertad Avanza, en la primera estocada de la mesa chica libertaria hacia el interior y con miras al 2025. En un distrito en el que, el año próximo no se vota para el Senado ni se renuevan bancas en la Legislatura provincial como en otros distritos, lo que hace bien complejo el armado del rompecabezas.
(Fuente: LPO)