Más de 800 mil personas participaron del reclamo en la Ciudad de Buenos Aires, por más fondos para gastos de funcionamiento y salarios de los profesores. La protesta se repitió en distintos puntos del país. La medida sumó apoyo del ámbito político y sindical
El documento final exigió actualización del presupuesto: “Lucharemos en una irrenunciable resistencia pacífica y democrática”
“La universidad pública argentina atraviesa un período crítico como consecuencia de la política implementada por el gobierno nacional”, señaló el texto que leyó la dirigente estudiantil frente a la multitud en Plaza de Mayo.
“Convocamos a la ciudadanía para sostener las universidades públicas abiertas. Son uno de los motores de la democracia, la producción y los lazos sociales”, agregó.
Luego, De Picolli explicó el motivo central del reclamo, que lleva meses. “Han sufrido un fuerte ajuste en términos reales en los denominados gastos de funcionamiento. Mantener los edificios, sostener las becas, comedores, laboratorios, servicios básicos, todo fue congelado a valores de septiembre de 2023″.
Por otro lado, desestimó que haya un consenso con los funcionarios del Poder Ejecutivo, luego de los aumentos anunciados en las últimas horas. “El aumento anunciado por el gobierno es absolutamente insuficiente”, sostuvo.
En ese fragmento, el documento explicó: “Cabe destacar que más del 90% de lo que el Estado destina a la Educación Superior está dirigido a salarios de quienes trabajan como docentes y nodocentes en las universidades. En estos últimos meses, el salario de las trabajadoras y trabajadores ha perdido 50 % respecto de la inflación. Este deterioro salarial se hermana con el del resto de sectores del mundo del trabajo. Ello lleva a retomar consignas de hace más de 20 años: ¡Ningún trabajador o trabajadora de las universidades nacionales por debajo de la línea de pobreza!”, reclamaron.
La exposición de la presidenta del movimiento estudiantil fue el cierre de la histórica jornada, que según cálculos de los presentes en la plaza, movilizó sólo en la Ciudad de Buenos Aires a más de 800 mil personas.
El último fragmento del mensaje consensuado hizo alusión al espíritu de la marcha. “Todos los problemas que tenemos se resuelven con más educación y Universidad pública, con más inversión en ciencia y tecnología. Queremos que nuestras instituciones sean el dispositivo que le permitan a la Argentina desandar las desigualdades estructurales y emprender la senda del desarrollo y la soberanía. La educación nos salva y nos hace libres. Convocamos a la sociedad Argentina a defenderla”, cerró Fernández De Piccoli.
Minutos antes de las 18 comenzó el acto en Plaza de Mayo. Desde un escenario montado frente al Cabildo, la primera en hacer uso de la palabra fue la referente histórica de Madres de Plaza de Mayo, Taty Almeida, quien les pidió a los estudiantes que resistan frente a la posibilidad de que la universidad sea desfinanciada. Luego, Adolfo Pérez Esquivel, premio Nóbel de la Paz, se dirigió a la multitud presente en la plaza.
Más allá de la presencia de dirigentes políticos de la mayoría de los partidos, sindicalistas y militantes, la idea es expresar que la movilización fue transversal y con un único motivo, el de dejar claro que la sociedad argentina defiende la educación pública como uno de los valores que forman parte de sus idiosincrasia.
Intervención Inconstitucional
El Gobierno admite que la auditoría de las universidades públicas en realidad depende de la (Auditoría General de la Nación (AGN)
El anuncio de Pettovello fue para “instalar” el tema en la previa de la masiva manifestación por la educación. El organismo depende de Olmos y el oficialismo necesita de la aprobación en el Congreso para designar a un abogado afín a Karina Milei. En la UBA advirtieron que una intervención del Ejecutivo sería inconstitucional
Mientras se nutría la masiva Marcha Federal de la Educación, en la Casa Rosada advirtieron que no hay ninguna auditoría en marcha, ni planes de avanzar con un plan en ese sentido en el corto plazo. Ávidos por bajar el tono a la discusión que iniciaron la semana pasada, reconocieron, en cambio, que llevarla a cabo le correspondería a la Auditoría General de la Nación (AGN) y no al gobierno nacional, como habían anunciado la semana pasada en el tramo más belicoso de la discusión que se complejizaba a medida que avanzaban las columnas de estudiantes hacia la Plaza de Mayo.
(Fuente: Infobae)